viernes, 29 de abril de 2016

Práctica 16: El estrés infantil




El niño/a en edad infantil puede sufrir estrés si le sumamos a la jornada escolar diversas actividades en horario extraescolar, dejando a este sin tiempo para el ocio, factor importantísimo en estas edades, a la hora de relacionarse con sus iguales y desarrollar sus inquietudes.

Las causas que provocan el estrés infantil suelen ser:
·         La salud
·         La escuela
·         La familia

Actualmente la sociedad ejerce una gran presión en el niño/a para su maduración y aprendizaje, a partir de 5 años, se pretende que aprendan a leer y con 6 años tengan este hábito adquirido, cuando hace algún tiempo esto se aprendía en primero de educación primaria. El estrés genera en la infancia el problema de que los niños/as no puedan ser niños/as debido a las exigencias del día a día.

La escuela “LAS CAÑADAS” de Mijas, busca favorecer las estrategias de afrontamiento que utilizan los niños/as para enfrentarse a las situaciones de estrés cotidiano (con ven la situación y como les afecta) y afrontarlas de modo que no les provoque ningún daño. Esta iniciativa es una experiencia piloto en España  que se realiza a través de un formulario y una serie de actividades con una duración de 20 sesiones. El agente encargado de llevarlo a cabo es el profesor/a, el cual a través de debates y análisis que se realizan con el alumnado, consigue que aprendan unos de otros, escuchando diversas opiniones y formas de resolver un problema. Con esto se pretende prevenir futuras situaciones de estrés en la infancia que una vez llegada la adolescencia podrían resultar más complicadas de afrontar.

 
Opinión personal
El tema del estrés infantil es un asunto serio que debemos tener en cuenta, pues este perjudica seriamente la salud de los niños en su desarrollo. Hoy en día vivimos en una sociedad en la cual se le da mucha importancia a que los niños adquieran rápidamente toda clase de conocimientos mediantes actividades extraescolares. En muchas ocasiones la familia  no tiene en cuenta que el niño como tal, debería disponer de tiempo para el juego.

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